The Second Brain of the human being
Loading...
Date
Directores
Journal Title
Journal ISSN
Volume Title
Publisher
Universidad Estatal Península de Santa Elena
Abstract
Description
There are two types of brains, made known to all by the central nervous system, which would be the brain where emotions are formed based on past experience. The second brain, the other, ignored by most humans is the brain that is in the bowel, or mesenteric Enteral Nervous System, characterized by the ratio of the brain and digestive system, the brain has more neurons than his counterpart, stored emotions, determines the response according to the context and intensity of the stimulus. This article aims to analyze the participation of the main second brain in human behavior, with the help of a new specialty of medicine, Neurogastroenterology, with its explanation determines the reaction between the brain and the central brain mesentery is identifies each one in its functions, is analyzed as referential stress affects behavior, producing a crisis. Manifested with physiological and psychological disorders, such as diarrhea or constipation, pain and anxiety disorders, fatigue, insomnia, poor concentration and memory loss turn gastric ulcers, hypertension, gases, not necessarily due only to a stomach problem caused by poor food intake, but by emotional behaviors that adversely affect this part of the body. A test for the influence of the second brain in impulsivity and its collateral damage in the body.
Existen dos tipos de cerebros, el conocido por todos formado por el sistema nervioso central, que sería el cerebro donde las emociones se forman en base a las experiencias anteriores. El segundo cerebro, el otro, ignorado por la mayoría de seres humanos es el cerebro que está en los intestinos, Sistema Nervioso Enteral o mesentérico, que se caracteriza por la relación del cerebro y aparato digestivo, este cerebro posee más neuronas que su par, guarda emociones, determina la respuesta de acuerdo al contexto y la intensidad del estimulo. Este articulo tiene por objetivo principal analizar la participación del segundo cerebro en la conducta del hombre, con la ayuda de una nueva especialidad de medicina, la Neurogastroenterología, con su explicación se determina la reacción que existe entre el cerebro mesenterio y el cerebro central, se identifica a cada uno en sus funciones, se efectúa un análisis referencial de como el estrés influye en la conducta, produciendo una crisis. Se manifiestan con trastornos fisiológicos y psicológicos, como diarreas o estreñimiento, con dolor y trastornos de ansiedad, cansancio, insomnio, falta de concentración perdida de la memoria y a su vez ulceras gástricas, hipertensión, gases, que no necesariamente se debe solamente a un problema estomacal producido por una mala ingesta de alimentos, sino por comportamientos emocionales que repercuten negativamente en esta parte del cuerpo. Se comprobará la influencia del segundo cerebro en la impulsividad y sus daños colaterales en el organismo
Existen dos tipos de cerebros, el conocido por todos formado por el sistema nervioso central, que sería el cerebro donde las emociones se forman en base a las experiencias anteriores. El segundo cerebro, el otro, ignorado por la mayoría de seres humanos es el cerebro que está en los intestinos, Sistema Nervioso Enteral o mesentérico, que se caracteriza por la relación del cerebro y aparato digestivo, este cerebro posee más neuronas que su par, guarda emociones, determina la respuesta de acuerdo al contexto y la intensidad del estimulo. Este articulo tiene por objetivo principal analizar la participación del segundo cerebro en la conducta del hombre, con la ayuda de una nueva especialidad de medicina, la Neurogastroenterología, con su explicación se determina la reacción que existe entre el cerebro mesenterio y el cerebro central, se identifica a cada uno en sus funciones, se efectúa un análisis referencial de como el estrés influye en la conducta, produciendo una crisis. Se manifiestan con trastornos fisiológicos y psicológicos, como diarreas o estreñimiento, con dolor y trastornos de ansiedad, cansancio, insomnio, falta de concentración perdida de la memoria y a su vez ulceras gástricas, hipertensión, gases, que no necesariamente se debe solamente a un problema estomacal producido por una mala ingesta de alimentos, sino por comportamientos emocionales que repercuten negativamente en esta parte del cuerpo. Se comprobará la influencia del segundo cerebro en la impulsividad y sus daños colaterales en el organismo