Abstract:
Entre los cambios más importantes que se están impulsando en el Ecuador se encuentra el reconocimiento de la Economía Social y Solidaria (ESS) como base para la transformación del Sistema Económico que se ha caracterizado por el predominio del valor mercantil y la generación de ganancias monetarias, en donde los sujetos sociales no tienen otra opción que competir mientras el Estado garantiza este funcionamiento del mercado limitando entre otras cosas toda forma de acción colectiva (Coraggio. 2011). En tal sentido se ha modificado el marco legal e institucional del país que en términos económicos busca fomentar y potencializar las iniciativas populares y asociativas en diversas áreas de la economía.
Destacan como premisas para este cambio, el hecho de que ellas encierran una amplia experiencia y potencial para la generación de riquezas y bienestar, y que su desarrollo está basado en valores sociales y solidarios, aspectos que constituyen los elementos claves de éste nuevo modelo. Sin embargo, no existe el conocimiento suficiente para transitar hacia ese nuevo sistema. Las iniciativas populares practicadas durante años 80 y 90, por los actualmente denominados actores de la economía popular y solidaria constituyen un entramado complejo de saberes y relaciones, que es necesario desentrañar y entender a fin de encontrar las mejores formas en que las políticas públicas y los actores sociales deban transitar hacia estos cambios.
La presente investigación propone una mirada al contexto de las Comunas Jambelí y Villingota, localidades rurales situadas en la zona costera central del Ecuador, para analizar desde estas experiencias y prácticas, las lógicas que determinan el funcionamiento de sus circuitos económicos así como las posibilidades de consolidación socioeconómica, dando énfasis a la identificación de valores y estrategias que viabilicen un modelo de desarrollo centrado en los seres humanos.