Producción orgánica de pitahaya amarilla Hylocereus megalanthus, mediante invernadero como alternativa económica, social y ambiental, en el cantón Palora.

Abstract

El Gobierno del Ecuador implementó en 2021 el Plan de Creación de Oportunidades (2021–2025), que contempla cinco ejes: económico y generación de empleo, social, seguridad integral, transición ecológica e institucional. Dentro del eje económico se destacan aspectos como el empleo, reducción de brechas laborales, emprendimiento, comercio, turismo y producción agrícola con enfoque en soberanía y seguridad alimentaria. En este marco, se promueve la producción agroecológica y orgánica a nivel nacional. La provincia de Morona Santiago, con gran biodiversidad, es una de las más productivas en la región amazónica en términos agrícolas y pecuarios. Su economía depende principalmente de la agricultura. Palora, uno de sus cantones, ha vivido un cambio importante desde 2016 con la producción de pitahaya amarilla, que se ha convertido en la principal fuente de ingresos para muchas familias. Actualmente, se cultivan alrededor de 3.000 hectáreas de esta fruta, mayormente como monocultivo convencional. La pitahaya se comercializa en dos segmentos: nacional y de exportación, diferenciados por calidad, tamaño y manchas. Para mantener la producción, los agricultores aplican tratamientos químicos cada ocho días, lo que convierte el cultivo en intensivo y con alto uso de agroquímicos. Ante esto, se propone la producción orgánica de pitahaya amarilla bajo invernadero como una alternativa económica, social y ambiental. Esta propuesta busca mejorar los ingresos de los productores, proteger su salud y la de los consumidores, y conservar el medio ambiente reduciendo el impacto de los productos químicos en suelo, agua y aire.