Resumen:
El medio ambiente en Colombia se encuentra vulnerable por los continuos derrames presentes en los últimos años, estos se han presentado por diversas circunstancias entre las que cabe destacar que suelen ser accidental por la misma empresa prestadora del servicio o por atentados de grupos al margen de la ley. En algunas circunstancias, dichas situaciones se han generado en sectores del país de difícil acceso impidiendo el desarrollo de estrategias de vigilancia y control o en el caso dado, de recuperación. Generando no solo el daño del medio ambiente sino afectando a la población que vive cerca de donde ocurren estos derrames correspondientes al oleoducto transandino. Esto tiene algunas consecuencias negativas como es la contaminación del agua, suelo, flora y fauna. Causando graves problemas ambientales y económicos. Además de estos factores, a lo largo del tiempo se vienen presentando daños por parte de grupos alzados en armas que quieren obtener de una manera ilegal el producto que se transporta por los oleoductos del país. Cada año se registran múltiples atentados en los cuales los recursos naturales terminan siendo contaminados. El objetivo de aplicar estos tratamientos está dirigido principalmente a transformar los
contaminantes en compuestos con menor peligrosidad para la población en un futuro, más estables y disminuyendo en grandes cantidades su movilidad. Los tratamientos fisicoquímicos aprovechan las propiedades físicas y/o químicas de los contaminantes o del medio contaminado para destruir, separar o contener la contaminación. Este tipo de tecnologías generalmente son efectivas en cuanto a costos y pueden concluirse en periodos relativamente cortos, en comparación con otras tecnologías como el caso de la biorremediación. La electrorremediación es una tecnología enfocada básicamente a la restauración de los suelos contaminados en la cual se genera un campo eléctrico suministrando corriente directa en la zona afectada por el derrame del petróleo. Para emplear una diferencia de potencial, o una corriente directa, se requiere el uso de electrodos (ánodo y cátodo), los cuales van instalados en pozos excavados a una corta profundidad. Normalmente se los humectan con algunas soluciones electrolíticas generando así una mejora en las condiciones de conducción del campo eléctrico. La acción del electrolito permite movilizar el contaminante hacia los pozos en donde posteriormente será extraído. Al contrario del arrastre de fluidos, esta técnica permite establecer una migración dirigida, donde se evita la dispersión del contaminante fuera de la zona de tratamiento que es lo que más nos interesa, así no se generara una mayor contaminación y tendremos controlada la remediación del suelo