Abstract:
La disgrafía es un trastorno del aprendizaje que dificulta la escritura, afectando el
rendimiento académico, emocional y social de los estudiantes, especialmente en educación básica.
Este trastorno puede causar frustración, ansiedad y baja autoestima, llevando al desinterés escolar
y problemas de socialización. La evaluación técnica es esencial para identificar la disgrafía,
utilizando observaciones, entrevistas y herramientas estandarizadas para establecer diagnósticos
completos. Dentro del proceso de investigación se utiliza una metodología cualitativa, con un
enfoque descriptivo interpretativo mediante la revisión de artículos científicos. Para intervenir, se
recomiendan estrategias como el uso de tecnología asistidas, técnicas multisensoriales y
adaptaciones pedagógicas que ofrezcan más tiempo y opciones de presentación. La colaboración
familia y escuela es decisiva para reforzar estas estrategias y fomentar la motivación de quien la
padece. Los beneficios de estas metodologías incluyen una mayor inclusión, autoestima y
participación, mientras que los desafíos pueden ser la falta de recursos y la resistencia al cambio.
Una orientación integral mejora la calidad educativa y promueve un entorno inclusivo y de apoyo.